75 años

Edicion_2724

Una ola que apenas asoma

La última encuesta de Ipsos para Perú21, aún marcada por altos porcentajes de indecisos (32 %) y votos nulos o blancos, comienza a perfilar un tridente inicial en la carrera hacia 2026: Keiko Fujimori (11 %), Rafael López Aliaga (6 %) y Carlos Álvarez (6 %). Todos, eso sí, todavía muy lejos de despegar.

En Lima, Keiko lidera con 16 %, seguida por López Aliaga (11 %) y Álvarez (8 %). Pero lo más revelador está en los escenarios de segunda vuelta, donde se miden los anticuerpos políticos. Keiko, quien sería candidata por cuarta vez, perdería en ambos casos analizados: frente al actual alcalde de Lima y frente al comediante convertido en figura política.

Lo que llama la atención es la diferencia: mientras López Aliaga le sacaría seis puntos (33% a 27%), Álvarez estiraría la ventaja a diez (37% a 27%). El “techo” del antifujimorismo parece consolidarse, mientras el humorista popular empieza a mostrar un perfil con menos resistencias. Si bien todo es aún prematuro, estas cifras colocan a Álvarez como un eventual candidato con mayores posibilidades de ganar en segunda vuelta. O, al menos, con menos dificultades para construir una mayoría.

El alcalde de Lima desestima encuestas, pero no repunta fuera de la capital.

En semanas recientes, Álvarez ha intentado despejar dudas sobre su pasado político. Ha pedido perdón públicamente por haber apoyado el autogolpe de Alberto Fujimori en 1992 y por haber dejado que ese entusiasmo influya en su arte. “Me equivoqué, ¿cuál es el problema? Ya pedí disculpas y me reconcilié con mi público”, ha dicho. Su gesto apunta a seducir un centro aún disperso.

También ha lanzado propuestas provocadoras, como una “Comisión de la Verdad del COVID-19”, y ha acusado al gobierno de Martín Vizcarra de haber “saqueado al país”. En esa línea, se pregunta “por qué discriminar a un cómico”, en un país donde los políticos tradicionales ya no generan confianza.

En un clima político dominado por la decepción, el miedo y la rabia –según lo recoge también la encuesta de Ipsos–, el comediante podría ocupar el espacio del “outsider con memoria”. Aquel que fue parte del sistema mediático, pero hoy lo interpela con una mezcla de arrepentimiento y rebeldía.

Rafael López Aliaga, por su parte, ha desestimado el valor de las encuestas, quizá anticipando un retroceso. Mientras tanto, Keiko Fujimori parece consolidarse como la candidata del antifujimorismo, una etiqueta que puede ser a la vez su base y su condena.
Como diría la propia encuesta, aún hay “mucho pan por rebanar”. Pero si Carlos Álvarez sigue mostrando menos anticuerpos que sus competidores, el show –esta vez político– podría ir en serio.